Cómo duplicar tu cosecha de pimientos con un abono simple aplicado en el momento justo
Truco de jardineros para tener más pimientos: no es magia, es nutrición bien aplicada
¿Tus plantas de pimiento crecen pero no dan frutos? La solución podría estar en una alimentación correcta, no en más sol o más agua. Los pimientos son exigentes, pero responden muy bien si reciben lo que necesitan.
Además de luz y riego, esta hortaliza necesita dosis estratégicas de ciertos minerales en etapas claves de su desarrollo.
Con una rutina sencilla — ya sea con fertilizantes caseros o comerciales — es posible mejorar la floración, obtener frutos más grandes y prevenir problemas comunes como la podredumbre apical.
Según esta guía sobre nutrición en pimientos, lo importante no es cuánto se aplica, sino cuándo y con qué combinación.
¿Qué aporta cada nutriente?
| Elemento | Función principal |
|---|---|
| Fósforo | Favorece la floración y el inicio del fruto |
| Potasio | Mejora sabor, tamaño y textura |
| Boro | Facilita la fecundación de las flores |
| Calcio | Evita grietas y enfermedades en los extremos |
| Magnesio | Refuerza el verdor y la fotosíntesis |
¿Cómo aplicar correctamente?
- Inicio de floración: fósforo + boro
- Formación de frutos: potasio + calcio
- Repetir cada 10 a 14 días con poca cantidad
- No aplicar con tierra seca: primero regar
Errores que reducen la cosecha
- Mucho nitrógeno = muchas hojas, pocos frutos
- Riego con agua fría = caída de flores
- Plantas en sombra o muy juntas = mala polinización
Dato útil: hasta los pimientos que germinan de una semilla de supermercado pueden dar excelentes cosechas si reciben esta combinación. El truco está en nutrir en el momento justo — y no pasarse.
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