El calzado barefoot —también llamado minimalista— se ha vuelto popular entre quienes buscan más naturalidad al caminar. Pero aunque parezca simple, requiere adaptación.
Estos zapatos tienen suela delgada, sin tacón, sin amortiguación y espacio amplio para los dedos. El objetivo es replicar la pisada descalza y estimular músculos que casi no usamos con calzado convencional.
Según este informe de Pravda.ru, su uso trae beneficios reales, como mejor equilibrio y postura, pero solo si se hace de forma gradual y consciente.
Aspecto | Zapato común | Barefoot |
---|---|---|
Altura del talón | 1–2 cm | 0 mm (sin caída) |
Amortiguación | Espuma, blando | Mínima o nula |
Espacio para los dedos | Ajustado | Amplio |
Peso | Pesado | Ligero |
Flexibilidad | Limitada | Alta |
Volver a lo natural puede ser saludable — pero solo si entendemos que nuestros pies modernos necesitan tiempo para reaprender a caminar como antes.